Limpieza y engrase adecuados

El mantenimiento de la transmisión muchas veces olvidado, tarea tediosa pero imprescindible para su correcto uso, si además queremos que nos dure mucho tiempo cadena, plato y piñones es fundamental cuidarla.
A mi personalmente me llega a obsesionar su correcto funcionamiento, llegando incluso a desengrasar por completo y engrasar de nuevo varias veces al mes, primero por su correcto funcionamiento y segundo porque una transmisión bien limpia siempre luce bien en la bici.
No hace falta tener un taller para hacerlo ni mucho tiempo tampoco, siempre desmonto la cadena por su eslabón rápido, partiendo de la base que la cadena lo lleva instalado, así será más sencillo y rápido desmontarla.

Si no lo lleva podremos aprovechar para instalarlo tronchando la cadena y añadiendo el eslabón. 

En la imagen izquierda tenemos un eslabón rápido, para mi es tan importante llevarlo instalado en la cadena como el llevar uno encima en cualquier salida por si hubiera alguna rotura de la cadena.

Para instalarlo es muy simple, al montar la cadena nueva cortamos por donde sea necesario y la empalmamos con él, para acortar la cadena sera necesario el tradicional troncha-cadenas, su mecanismo es tan simple que no hará falta explicar.

Para montar y desmontar el eslabón serán necesarios unos alicates específicos, si bien para montarlo no será del todo necesario, ya que colocando con la mano y con su posterior uso acaba de clavar y queda perfectamente colocado, si lo serán para desmontar la cadena cuando sea oportuno, ya sea para su limpieza o para su sustitución, puesto que el eslabón una vez enganchado queda clavado recomendaría tener unos.

En la imagen derecha tenemos un eslabón abierto, es lo que suele ocurrir cuando la cadena se empalma con troncha cadenas, el remache que lleva instalado de serie pierde la forma de la cabeza cuando se intenta remachar o des-remachar y el eslabón ya no ofrece ninguna garantía, mas tarde o mas temprano en algún esfuerzo este mismo eslabón que es el mas débil de toda la cadena se abre por lo que en un momento de máxima tension sobre la bici puede producir un accidente importante, ya que si nos encontramos de pie sobre la bici en el momento en el que parte la transmisión queda completamente libre y toda la fuerza de nuestro cuerpo nos empuja hacia adelante si estamos de pie, si estamos sentados podemos darnos un golpe con las rodillas en el manillar o cualquier otro infortunio.

Un procedimiento también olvidado cuando la cadena tiene cierto uso es comprobar en que estado o que vida le queda a la cadena, esto lo haremos con un calibre para comprobar su elongación (lo estirada que está) es un procedimiento muy simple, tenemos que comprobar con el calibre que por ambas extremos no entra en los eslabones, eso significará que está dentro de las tolerancias correctas para su uso, si por alguna de sus caras entrarán ambos extremos en el eslabón es que la cadena ya está al final de su vida útil.

En la imagen superior tenemos el calibre para comprobar la cadena, en este caso seria una cadena apta para seguir usando, en el caso de que el extremo izquierdo se insertara en el eslabón ya no lo sería.

Una vez comprobado lo anterior solo necesitamos unos alicates especiales para abrir el eslabón, una garrafa de agua grande, una brocha y desengrasante.
El procedimiento es sencillo, cortaremos la garrafa a unos 10cm de altura desde su base para utilizarla como recipiente, una vez lo tengamos desmontaremos la cadena por su eslabón rápido y la introduciremos dentro de nuestro recipiente improvisado, después procederemos a introducir la solución desengrasante, (KH7) podría servir, después con la brocha vamos frotando sin salpicar hasta que haya quedado diluida toda la grasa o aceite en la garrafa, realizando de este modo el desengrase conseguimos que sea más profundo que simplemente frotando superficialmente con un trapo.
Para limpiar piñonera o cassete tenemos dos opciones, una es desmontarlo y realizar el mismo proceso que hemos realizado con la cadena, y el otro es hacerlo con la brocha frotando por encima con la rueda desmontada de la bici para hacerlo más cómodamente, en este caso será este método más que suficiente para hacerlo bien.
Podremos observar en el fondo del recipiente la cantidad de impurezas que han salido, eso es precisamente lo que acorta la duración de la cadena y cassete la abrasión que produce, claro está dependerá también el terreno por el que nos movamos, siempre durará más una cadena que se ha movido por terrenos llanos que una que ha estado escalando, obviamente teniendo en cuenta que han llevado el mismo mantenimiento.

En la imagen superior tenemos una cadena KMC Gold de 11V, en el momento de la foto tenía 9.400Km. Aún le faltan un buen puñado de kilometros.

Cuando la cadena esta estirada es conveniente cambiarla ya ha empezado a deteriorar el resto de la transmisión, al estar estirada ya no caen los eslabones correctamente sobre piñones y platos produciendo un desgaste prematuro, empieza a caer sobre la cresta del diente y los afila.
Todo ello también repercute en la finura del cambio, recordar que la mayoría de platos son de aluminio y muchos cassete también, por lo que siendo la cadena de acero y el resto de la transmisión aluminio ya se sabe quien acaba perdiendo, el mas blando...

Solo nos faltará montar de nuevo y engrasar, ¿Con que? ¿Cera o aceite? Eso es elección personal y tema también a tratar en otro post, ya que es mucho más extenso que el limpiar la transmisión... ;)